6 También tradujo al castellano esta obra Diego de Astudillo; y lo que es más extraño, la tradujo en verso en 1791 el doctor don Pedro Pichó y Rius, a quien censuró ácremente, y con sobrada justicia, por su insufrible prosaísmo el señor don Leopoldo Augusto de Cueto, en su excelente Bosquejo Histórico-Crítico de la Poesía Castellana del Siglo XVIII, puesto al frente del tomo 61 de la Biblioteca de Autores Españoles, de Rivadeneyra (n. del a.).